indescriptibles crujidos de
pasión que comienzan
a amontonarse con la melodía
que impone sensualidad.
Al alzar tu vista, solo
observas un cuerpo que
viene por ti,
como si hubiera deudas
de por medio, y que quisieran
ser saldadas....
La sombra, cada vez,
empieza a tener mas de realismo,
y la audacia comienza a derretirse
como hielo en llama...
Te tomo... el calor de nuestros cuerpos
alientan a seguir en las tibias delicias
de los cuerpos ardientes.
Un beso que comienza en los labios,
y continua, en forma sutil,
hasta tu virilidad...
Virilidad adicta que hace
desear y desear
hasta explotar en calor...
y querer jugar a los
séptimos pecados
de la noche oscura.
Profunda dilatación,
oh si, muy profunda
suficiente para albergar
mi verga que estalla de calor...
Y en un abrir y cerrar de ojos,
comienzo a penetrarte,
primero, sutilmente,
luego, brutalmente,
hasta terminar de forma
lenta pero perpizcamente
hasta rozar tu zona erogena
y producir en ti espamos
de deseo,
grititos de desesperacion,
pues sientes como empieza
a correr en ti,
lo que tanto deseo,
produce en mi
al sentirlo caliente
correr por mis partes.